Esta serie la creé pensando en mi infancia, en los cuentos que leía y me hacían soñar con príncipes azules, altos y bellos que venían solícitos a buscarme. Pasados los años creo que las princesas de nuestra infancia se han quedado rancias y ahora no entiendo por qué se quedan esperando a un príncipe que las rescate. El objetivo de la serie es romper un poco los estereotipos que nos suelen transmitir la mayor parte de cuentos e historias infantiles. Quería mostrar a mujeres de cuento, transportadas al siglo XXI, que toman las riendas de sus vidas. Romper con el modelo de feminidad pasiva y sumisa y masculinidad violenta y salvadora que nos han transmitido desde pequeñas. Así nos encontramos una Caperucita Roja deseosa de encontrarse al lobo feroz en el bosque, o una Sirenita más preocupada por cómo tratamos a los océanos que en buscar el amor o a la Bella Durmiente que se ha quedado plácidamente dormida a la sombra de un árbol, después de leer un buen libro y tomarse varias copas. Bella, prefiere seguir con su sueño plácido y su momento de relax, y que nadie la moleste ni la perturbe. Alicia, la moderna, toma el sol en la playa mientras bebe un smoothie verde detox. Hoy en día, las mujeres hemos despertado de un largo sueño en el que la regla de una sociedad anticuada nos decía que para ser felices necesitábamos de alguien más. Por fortuna, hoy sabemos que ninguna mujer necesita un hombre para ser feliz. Hemos llegado a un punto en que muchas mujeres están despertando y aún no saben lo realmente fuertes que pueden llegar a ser…. como las mujeres de mis cuentos.